Reclaman al Contralor investigación sobre conflictos de interés de Ángel Cintrón

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San Juan de Puerto Rico- 5 de septiembre de 2008- El senador popular por el distrito de Guayama, Cirilo Tirado Rivera, reclamó hoy del Contralor de Puerto Rico, Manuel Díaz Saldaña, que investigue el conflicto de interés admitido y la violación del contrato firmado con el Senado por el exrepresentante y contratista, licenciado Ángel Cintrón al cabildear en calidad de director de campaña del PNP a favor de legislación que beneficiaba dos de sus clientes."

El licenciado Ángel Cintrón admitió públicamente que cabildeó en una sesión del Senado a favor de dos de sus clientes y que dicho cabildeo lo hizo en su calidad de director de campaña del PNP, en clara violación a disposiciones incluidas en el contrato de asesoría que firmó con el Presidente del Senado quien lo asignó a rendir servicios en la Secretaría de dicho cuerpo. El Contralor de Puerto Rico, cuyo término concluyó hace meses y que acostumbra a investigar, dentro y fuera de su jurisdicción, cualquier asunto planteado públicamente está obligado a investigar esta falta confesa y hacer los referidos correspondientes para proteger los fondos públicos", destacó en conferencia de prensa en su oficina del Capitolio.

Dijo que "el pueblo de Puerto Rico tiene derecho a saber si las horas facturadas al Senado por el licenciado Cintrón corresponden a labores rendidas para este cuerpo legislativo; y necesita saber cómo influyó para la aprobación o no de legislación que afectaba de una manera u otra a sus clientes en detrimento del pueblo de Puerto Rico".

Asimismo, el legislador popular afirmó que "no sorprende la actitud de tolerancia a los conflictos de interés y favoritismo del presidente de la conferencia legislativa del Partido Nuevo Progresista porque cuando era director ejecutivo de la Compañía de Turismo, se vio involucrado en controversias relacionadas con esquemas de esa clase. Al comienzo de sus funciones oficiales en la agencia, él negoció unos contratos para su antiguo patrono el bufete McConnell-Valdés, lo que constituía un serio conflicto de intereses".En ese sentido, indicó que "finalmente, Fortuño no otorgó otorgó los contratos al bufete debido a la controversia pública que se generó sobre el asunto y que fue ampliamente reseñada en la prensa del país".

Agregó que el entonces senador Charlie Rodríguez fue uno de los líderes del PNP que cuestionó la contratación de McConnell-Valdés. Desde esas primeras gestiones Fortuño demostró que lejos de ser unas determinaciones ingenuas y desacertadas, sus actuaciones revelaron su seria ambivalencia y falta de entereza en promover la transparencia en las actuaciones públicas. Cualquier persona con entereza moral reconocería que contratar a su anterior patrono constituye una actuación ampliamente impropia, más aún cuando se trata de un abogado". "Ahora vemos que su director de campaña, Ángel Cintrón confesó que ha actuado simultáneamente como contratista y como cabildero a favor de clientes privados, todo ello contrario con las normas que rigen en Senado. Ante esas actuaciones impropias ha guardado silencio y lo ha defendido, a pesar de su alegado y reiterado compromiso de transparencia. Nuevamente, nos demuestra que dice una cosa y hace otra cosa", concluyó diciendo Cirilo Tirado Rivera.